Una original forma de consumir garbanzos.
10-12 unidades
250 gr de garbanzos secos (crudos, no sirven los garbanzos de lata que venden en el supermercado ya que estan cocidos)
2 cebollas medianas
1 taza de perejil
1 taza de cilantro
2 dientes de ajo
1 cucharadita de bicarbonato de sodio
1/2 taza de harina de garbanzos
Sal, pimienta y comino a gusto
–Utensilios necesarios
2 bowls grandes
Cucharada
Procesador de alimentos o robot de cocina
Placa para horno
Colocar los garbanzos en un bowl, cubrirlos con agua y dejarlos reposar al menos 12 hs.
Desechar el agua de remojo y colocarlos en el vaso de la procesadora de alimentos o robot de cocina.
Agregar la cebolla picada muy fina, el perejil, el cilantro, el ajo, la sal, la pimienta y el comino. Procesar hasta obtener una masa homogénea.
Verter la preparación en un bowl, añadir el bicarbonato de sodio y la harina y mezclar bien hasta formar una masa maleable.
Dejar reposar una hora.
Tomar pequeñas porciones de masa, formar bolitas y disponerlas en una placa apta para horno previamente aceitada.
Cocinar a 180° hasta que se doren de ambos lados.
En la receta original se fríen en abundante aceite caliente pero esta es la versión saludable por lo que opté por hacerlas al horno e igualmente quedan muy bien.
Consumirlas calientes acompañadas de una ensalada verde y tahin.
Para acompañar este plato te recomiendo una ensalada crudivegana de vegetales.