Ya hace tiempo que tenía organizado este viaje para hacer un curso de panadería y repostería sin gluten, así que aproveché para hacer la ruta vegana y descubrir lo Bueno, Bonito y Vegano en Madrid.
Cuando comencé la búsqueda no imaginé encontrarme con una oferta gastronómica tan amplia y variada, de repente me encontré con una lista de unos 20 establecimientos a visitar y solo 3 días disponibles….estaba en problemas!! Decidí leer las opiniones de los que ya habían ido para afinar mi búsqueda y así finalmente reduje mi lista a tres restaurantes y una casa de té.
Mi primera parada de la ruta vegana fue Yerbabuena. Bueno, Bonito y Vegano? Ya lo veremos..
Ubicado en la calle de bordadores 3, muy cerquita de la puerta del sol, lleva abierto unos 10 años y si no reservas con antelación casi seguro que te quedas sin mesa.
Es un restaurante muy chiquito pero luminoso y alegre. Yo llegué sobre las 13:30 sin reserva pero tuve la suerte de ser recibida por Graciela, su dueña, que al escuchar mi acento argentino me dijo que
no dejaría sin mesa a una compatriota y encima vegetariana!!
Así que ahí nomás me acomode en una mesita e intercambié unas palabras con esta Rosarina súper simpática que hasta me ofreció cambiarme la panera cuando le dije que prefería no comer trigo.
Tiene una carta muy extensa y variada, es posible comer a la carta o elegir el menú a 20 euros que incluye entrada, plato y postre pero dado que las porciones son realmente abundantes, Graciela me recomendó que pida directamente a la carta un plato y postre.
Casi todos los platos tienen opción vegana y sin gluten. Yo elegí una pizza sin gluten con vegetales que estaba buenísima y era enormeeee!!! Para tomar pedí la bebida estrella: yerbabuena que como está hecha con leche también tiene opción vegana. Estaba riquísima aunque me pareció un poco pesada para acompañar una comida.
De postre probé la tarta de zanahoria que si bien era vegana, no había opción sin gluten pero como estaba antojada la pedí igual y no me equivoqué, estaba deliciosa!!
La única critica que tengo para hacer es que el precio de los postres (7€) iguala al de algunos de los platos principales.
Yerbabuena me gustó mucho, los productos se notan que son frescos, los precios (salvo los postres) correctos y la atención muy buena. Definitivamente volvería!!
La siguiente parada fue Botanique
Ubicado en el segundo piso del mercado Antón Martín, muy cerca de la estación Atocha.
Una apuesta jugada de Nacho Sánchez quien tomó el lugar de una antigua charcutería (donde se venden embutidos) y lo transformó en un acogedor rinconcito para comer al mediodía y por la noche. Su cocina es crudivegana y súper sabrosa.
Al mediodía ofrecen un menú a 9 euros (entrada, plato principal, bebida y pan) y por 2,5 euros más tienes el postre.
Yo fui un martes y probé una sopa de coliflor de entrada, luego unos tallarines de zucchini crudiveganos con salsa pesto y de postre una tarta de zanahoria con un rico tecito de frutos rojos. Hacen un pan de centeno con masa madre y unas crackers deshidratadas de muerte!
Todo estaba exquisito y fue en el único lugar donde no me fui con la panza súper llena y sensación de pesadez a pesar de haber comido tres platos….y eso es lo bueno de la cocina crudivegana!!!
Este fue sin duda mi restaurante preferido ya que su cocina es ligera pero sabrosa e innovadora.
Es un restaurante para recomendar y yo sin duda volveré para probar su famosa tabla de quesos crudiveganos que sirven generalmente por la tarde/noche.
En mi ruta vegana éste restaurante cumplió todos los requisitos de Bueno, Bonito y Vegano en Madrid!
El último restaurante que visité y que me desilusionó enormemente fue AL NATURAL
Había leído muy buenas críticas por lo que estaba en lo alto de mi lista.
Ya al entrar me deprimió un poco la oscuridad del local ya que no hay ni una sola ventana, la única comunicación con el exterior es la puerta de entrada y luego hay que atravesar un largo pasillo donde esta ubicada la barra para acceder a las mesas. Además la decoración es muy oscura y sobrecargada para mi gusto.
Al mediodía hay un menú por 12 euros de entrada, plato, postre y bebida. No hay platos sin gluten pero si algunos platos con opción vegana.
Pedí falafel de entrada y hamburguesas de couscous y espárragos después.
Todo me pareció muy grasoso y pesado, le falta una buena ensalada verde para acompañar.
De postre había melón, sandia o helado no vegano….me lo hicieron difícil porque ninguna de las tres me convencían pero al final me tomé el helado ya que el melón o la sandia de postre termina en mala digestión seguro!!!
La verdad que no lo recomendaría ni volvería a ir.
El final para los Golosos
Para los celiacos golosos o para todo aquel que quiera disfrutar de algo dulce sin gluten les recomiendo Celicioso.
Es un local muy bonito ubicado en pleno centro de Madrid, muy cerquita del metro Gran Vía y del barrio de Chueca. Me hace acordar a las bakery’s norteamericanas por la decoración y porque su especialidad son los cupcakes. Podemos encontrar una decena o más de diferentes sabores y para todos los consumidores: celiacos por supuesto, veganos, sin azúcar, etc.
También hacen tartas, tortas, alfajores, cookies, cheseecake y otras cositas. Lo que le falta como producto es pan y alternativas saladas.
Al mediodia sirven menú y por la mañana puedes desayunar por 3€ un té o café con una de sus sabrosas especialidades.
La primera vez que fui debo confesar que pase de largo porque no pensé que ESE local con cosas dulces tan vistosas fuera el que yo buscaba.
Ese día aposté por la opción más SIN de todas: un cupcake de chocolate con mermelada de frambuesas sin productos lácteos ni azúcar y un té verde con coco. Me pareció imposible que algo así este bueno y evidentemente me equivoqué porque estaba riquísimo!
La segunda vez fui con antojo de probar la tarta Banofee…para los que la conocen saben que es una verdadera bomba hecha con banana y dulce de leche 🙂 De mas está decir que no había opción vegana ni sin azúcar pero como al menos no tenía gluten me auto convencí que era una opción muy sana..sanísima jajjajaa y la verdad que estaba súper buena!
Otro día pase y compre un par de alfajores de maicena con dulce de leche que estaban mmmmmm celiciosos!!!
Me gusta mucho este lugar aunque parezca todo muy industrializado porque la verdad que los productos son frescos y se nota que los elaboran diariamente. Si pasan por Madrid no duden en ir.
